La actriz escribió un texto para el The New York Times donde habló sobre los refugiados y las fronteras.
La actriz Angelina Jolie se manifestó en contra de la polémica orden ejecutiva del presidente Donald Trump, quien suspendió la entrada de todos los refugiados a los Estados Unidos durante 120 días y prohibió a los refugiados sirios por tiempo indefinido.
Conocida por su labor humanitaria con los refugiados, Angelina no podía quedarse callada respecto a lo que pasa en su país, por lo que en un editorial publicado en The New York Times, Jolie escribió que la respuesta de los Estados Unidos a la crisis de los refugiados debe ser “basada en hechos, no en miedo”.
“Los refugiados son hombres, mujeres y niños atrapados en la furia de la guerra, o la cruz de la persecución (?) Lejos de ser terroristas, a menudo son víctimas del terrorismo?, escribió la madre de seis niños.
Angelina Jolie es una activa enviada humanitaria y especial para el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Ha trabajado con las Naciones Unidas desde 2001 y ha realizado más de 50 misiones para ellos.
“Los estadounidenses han derramado sangre para defender la idea de que los derechos humanos trascienden la cultura, la geografía, la etnia y la religión”, redactó la actriz en el The New York Times.
Jolie ha visitado a los refugiados en varias partes del mundo.
“La decisión de suspender el reasentamiento de refugiados a Estados Unidos y negar la entrada a ciudadanos de siete países de mayoría musulmana ha sido sorprendida por nuestros amigos de todo el mundo precisamente por este récord”.
La actriz escribió que si bien la seguridad del país en medio de la crisis de refugiados y las amenazas por el terrorismo debe ser una prioridad, el actual orden ejecutivo no es la solución.
“Nuestra respuesta debe medirse y debe basarse en hechos, no en miedo”.
Jolie dice que la causa es especialmente cercana a su corazón.
“Como madre de seis hijos, todos nacidos en tierras extranjeras y orgullosos ciudadanos estadounidenses, quiero mucho que nuestro país esté a salvo para ellos y para todos los niños de nuestra nación. Pero también quiero saber que los niños refugiados que califiquen para el asilo siempre tendrán la oportunidad de presentar su caso a una América compasiva. Y que podemos gestionar nuestra seguridad sin anular a ciudadanos de países enteros -ni siquiera bebés- como inseguros para visitar nuestro país en virtud de la geografía o la religión.
“Simplemente no es cierto que nuestras fronteras están superadas o que los refugiados son admitidos en los Estados Unidos sin un escrutinio estrecho”, añadió.
