La desaparición de Naya Rivera no ha sido la única desgracia con la que cuenta el historial del Lago Piru, otras personas más han perdido la vida ahí.
El pasado 8 de julio se reportó la desaparición de Naya Rivera, la actriz de ‘Glee’ había rentado una embarcación para pasear con su hijo de 4 años de edad. El pequeño regresó con vida, pero de ella no quedó ni el rastro.
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La búsqueda de su cuerpo comenzó de manera inmediata, pero las autoridades no han tuvieron suerte. Tras cinco días, finalmente un cuerpo fue hallado en el Lago Piru.
¿Un lago maldito?
De acuerdo al diario Los Angeles Times, alrededor de siete personas se ahogaron en el Lago Piru entre 1994 y 2000. Según lo relatado en el año 2000 por Douglas West, gerente de parques y servicios de recreación del Lago Piru, en este lugar han habido al menos una docena de ahogamientos en los 23 años que lleva trabajando ahí. Según datos del diario, “la mayoría de las víctimas ahogadas eran nadadores que se aventuraban en aguas restringidas”. “Lo único que puedo enfatizar es que si los nadadores están cerca del agua, deben usar un dispositivo de flotación personal si saben nadar o no. Eso les salvará la vida”, dijo West al p
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Las muertes del Lago Piru
Al parecer ‘la maldición del Lago Piru’ inició en 1994, cuando un joven de 27 años de edad llamado Jesús Danilo Carranza murió ahogado tras salir a nadar con su familia. Según narra Los Angeles Times, el joven portaba el chaleco salvavidas, pero aún así falleció en el lago. Tres años más tarde, en 1997, la historia de Liborio Domínguez conmocionó a los lugareños, quienes relataron que debido a que la hija de Liborio había caído al lago, éste se lanzó a rescatarla. La pequeña sobrevivió, pero su padre no. El cuerpo de Domínguez fue rescatado días más tar
MAA Ese mismo año dos muertes más marcaron al Lago Piru: el joven Isidro Castillo, de 22 años, salió a pasear con su novia en bote. Él se aventuró a nadar en las aguas del lago, pero pronto se dio cuenta que no podía regresar a la embarcación, su desesperada novia le arrojó la boya pero Castillo no pudo alcanzarla. El cuerpo apareció un día después. Semanas más tarde una nueva muerte llegó al Lago Piru, cuando Anthony Mendoza, de 30 años, llegó a pasar la tarde con su familia al lugar. Como muchos otros, se metió al lago a nadar, pero tampoco pudo regresar al bote luego de meterse a nadar. Su cadáver fue hallado días después. Según relata Los Angeles Times, otras muertes más han marcado al Lago Piru, ya sea por las corrientes de viento o las aguas traicioneras del lugar que han hecho que algunos visitantes pierdan la vida. La belleza del Lago Piru es lo que sus visitantes más disfrutan, ya que se encuentra en una popular zona recreativa ubicada a 90 kilómetros de Los Ángeles, en el Bosque Nacional Los Padres. Ahí los visitantes acuden para navegar, hacer deportes acuáticos y acampar.
