Puede que en buena parte de las películas de Hollywood interprete a villanos malvados y sin escrúpulos, pero lo cierto es que en la vida real el actor Danny Trejo, de 75 años, no duda en actuar como todo un héroe cuando la situación lo requiere. Eso mismo ocurrió ayer miércoles en Los Ángeles cuando el veterano intérprete presenció un aparatosa colisión entre varios vehículos y, posteriormente, se percató de que un niño pequeño se encontraba atrapado en el interior de uno de los coches volcados. Como ha explicado el propio intérprete en una breve entrevista al canal local ABC 7, en ese mismo momento decidió adentrarse en el amasijo de hierros que se había producido tras el accidente para tratar de rescatar al menor, quien se encontraba paralizado por el miedo y, en el plano puramente físico, prácticamente imposibilitado para moverse.
De Villano de Hollywood a Superhéroe
“El impacto fue muy fuerte, hasta el punto de que desplazó el asiento más allá del cinturón de seguridad. Estaba en estado de shock y le dije: ‘Ok, tenemos que utilizar nuestros superpoderes’, y empezamos a gritar ‘superpoderes’. Luego le dije que tenía que utilizar sus músculos, y gritamos lo mismo”, ha relatado el protagonista de ‘Machete’ antes de hacer mención a la conexión tan especial que se creó entre ellos. https://www.instagram.com/p/B04jgtfgdpV/ “Cuando conseguí sacarle del coche me dije: ‘Gracias a Dios’. Era un niño con necesidades especiales. La madre de mi hijo trabaja con niños que tienen necesidades especiales y creo que sé tratar con ellos. La verdad es que acabamos forjando un estrecho vínculo. No le dejé mirar hacia atrás y de esa forma evité que tuviera que ver lo que había pasado”, ha añadido. Al mismo tiempo, varios efectivos del departamento de bomberos de la ciudad se encontraban asistiendo al resto de afectados por el choque, entre los que se encontraba la abuela del niño. En su caso, los bomberos tuvieron que echar mano de herramientas más sofisticadas para poder liberarla y, finalmente, el suceso no dejó más que tres heridos leves que ya se recuperan con normalidad en el hospital.
