La estancia de la princesa del pop en una clínica psiquiátrica para lidiar con el estrés al que ha estado sometida en los últimos tiempos a raíz de la enfermedad que padece su padre parece haber empezado a dar ya sus frutos, en vista de que este jueves Britney recibió un permiso para abandonar durante unas horas las instalaciones.
Lo primero que hizo la cantante fue poner rumbo a un salón de belleza de Los Ángeles para que retocaran su melena rubia. La estrella llegó al establecimiento acompañada de tres asistentes y solicitó que varias personas trabajaran a la vez en su pelo para que le retocaran las raíces y las extensiones en un tiempo récord.
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Según varios testigos presenciales, la artista se mostró en todo momento de muy buen humor y emocionada por disponer de unas horas para dedicarlas a acicalarse.
Esa salida puntual no significa, sin embargo, que Britney haya concluido su tratamiento médico, ya que se esperaba que al final de la jornada regresara a la clínica. Los familiares de la celebridad estarían convencidos de que lo mejor por ahora para ella es permanecer en un entorno controlado y bajo cuidado médico, por lo que apoyaron incondicionalmente la decisión que tomó hace unas semanas de buscar ayuda profesional antes de que la situación se saliera de control.
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“No es debilidad, es una señal de extrema fortaleza. La gente debería sentirse inspirada, sé que yo lo estoy”, aseguró su novio, Sam Asghari, a través de las redes sociales tras conocerse la noticia del ingreso de Britney.