El primo de la cantante fue asesinado en Barbados pocas horas después de que la familia había celebrado la Navidad
La cantante Rihanna atraviesa desde ayer martes uno de los momentos más duros y tristes de su vida al confirmarse el asesinato de su primo Tavon Kaiseen Alleyn en un suceso del que se conocen muy pocos detalles, al margen de que tuvo lugar en su Barbados natal y de que el joven murió tiroteado por un pistolero que no ha sido aún identificado por las autoridades.
Todavía impactada ante la tragedia que ha sacudido a su familia, la estrella del pop ha querido, sin embargo, recurrir rápidamente a su perfil de Instagram para honrar la memoria de su añorado familiar y, sobre todo, para lanzar un poderoso alegato en favor de la implantación de medidas más estrictas que sirvan para prevenir la tenencia de armas en su país.
“Descansa en paz, primo, no me puedo creer que haya pasado solo un día desde que pude abrazarte por última vez... Jamás me hubiera imaginado que no podría volver a hacerlo y sentir tu calor. Te quiero y te querré siempre. #Acabemos de una vez con la violencia de las armas”, ha escrito compungida en su perfil de Instagram junto con varias imágenes que la retratan con su primo, todas ellas tomadas recientemente.
Según el diario ‘Barbados Today’, Alleyn se encontraba muy cerca de su casa -posiblemente regresando a ella- cuando fue abatido por un individuo que le disparó múltiples veces y huyó rápidamente de la escena del crimen. Aunque fue trasladado de urgencia al hospital más cercano, los médicos no pudieron hacer nada para salvarle y falleció pocos minutos después de su ingreso.
El incidente, de acuerdo con la información proporcionada por el mismo medio, se habría producido en torno a las siete de la tarde, hora local.