Mientras el césped de Wimbledon vive su momento más competitivo, las gradas se han convertido en un escaparate de lujo silencioso: el de la alta relojería. Celebridades, atletas y leyendas del entretenimiento han llevado piezas excepcionales en sus muñecas, consolidando a Wimbledon como uno de los escenarios más elegantes (y discretos) para los amantes de los relojes.
Nick Jonas: Rolex
El cantante y actor fue captado con un Rolex Day-Date 36 en oro amarillo con esfera negra, una elección atemporal que grita sofisticación sin necesidad de ostentar.
David Beckham: Tudor Black Bay
Siempre impecable, Beckham eligió un Tudor Black Bay cronógrafo con diamantes, una pieza personalizada que confirma su papel como embajador de estilo y figura clave en el universo de la relojería contemporánea.
Eddie Redmayne: Omega
El ganador del Óscar lució un Omega Seamaster Aqua Terra 38mm con carátula roja, un reloj vibrante pero refinado, perfecto para su elegancia británica natural.
Desde el palco real hasta las zonas VIP, Wimbledon se consolida como una pasarela no oficial para los mejores relojes del mundo. En cada muñeca, una declaración de gusto, precisión y legado.