Del director griego, Yorgos Lanthimos y de la mano de Emma Stone, Mark Ruffalo, Willem Dafoe, Ramy Youssef y más, llega Poor Things, un filme que invita al análisis de la concepción entre el bien y el mal, así como de lo socialmente aceptable.
Sobre el filme
Bajo la premisa de estudiar el comportamiento humano y el desarrollo del hombre y la mujer en sociedad, o bien, alejado de la misma, Poor Things cuenta la historia del Dr. Godwin quien salva a una mujer de la muerte y le brinda una segunda oportunidad y vida, en su afán de analizar sus capacidades y percepciones de la misma.
De esta manera e inmersos en un universo en blanco y negro, transcurren los primeros minutos de la cinta que resulta un tanto confusa, pues pareciera ser un filme antiguo de suspenso a manos de un doctor demente, sin embargo y tras ver un par de escenas protagonizadas por Emma Stone en el papel de Bella Baxter, el filme consigue sumergirnos en la historia de ambos, dejando de lado cualquier prejuicio o idea preconcebida.
Los mensajes de Poor Things
“Asi como los cuerpos pueden curarse de las dolencias, los hombres y mujeres pueden mejorar tras ciertas experiencias”, resultó uno de los diálogos que más llamó mi atención, pues este consigue expresar a la perfección una de las premisas de la cinta.
Asimismo, declaraciones como “Si conozco el mundo puedo mejorarlo” o la idea de que “experimentar lo malo, la tristeza y el dolor nos hace crecer como personas”, consiguen sembrar algo en la audiencia, invitando a abrir el diálogo y a reflexionar sobre todo aquello de lo que en muchas ocasiones nos queremos escapar o limitar por temor a podernos lastimar.
Por otro lado, situaciones como el ver a la protagonista huir de su prometido para vivir una aventura con otro hombre y sin sentir mayor culpa por buscar experimentar con alguien más, nos hace pensar en la simplicidad del instinto, el cual, al final de cuentas, es natural.
Lo mejor de Poor Things
“Aprendí a darme felicidad por cuenta propia”, se escucha decir a Bella (Emma Stone), la protagonista rebelde, valiente e inadaptada social, pero llena de ganas de vivir la vida y experimentarlo todo. Es así como de un momento a otro su mundo (y la pantalla grande) se pintan de los colores más vivos y nos enseñan cómo es que descubre todo aquello que la rodea, permitiéndole ver el lado más mágico, burdo y fantasioso de la vida misma, o como ella dice, “del mundo que está lleno de azúcar y violencia”.
Sin duda alguna, el cast, encabezado por Stone es el mayor acierto del filme, así como lo es su diseño de vestuario y producción, los cuales ayudan a contar la historia a la perfección. Y finalmente y retomando párrafos previos, no podemos olvidarnos de los maravillosos diálogos e ideas expuestas en la cinta.
En resumen, Poor Things rebasa los límites de lo concebido y lo aceptable socialmente, en una especie de crítica (por no decir que es una burla) respecto a ideas de relaciones, sexualidad, formas de amar y mucho más, las cuales son perfectamente expuestas en una comedia inteligente y muy cautivadora.
*Las opiniones expuestas en este artículo son personales y no necesariamente representan los principios del medio.