Lorenzo Servitje, nacido en 1918, comenzó su trayectoria en el mundo del pan en la pastelería “El Molino”, fundada por su padre en 1928. A través de su vida, Lorenzo transformó este modesto inicio en uno de los imperios alimenticios más grandes del mundo, Grupo Bimbo, convirtiéndose así en uno de los hombres más ricos de México.
Los inicios de un empresario
Desde temprana edad, Servitje se involucró en el negocio familiar, aprendiendo el oficio de panadero mientras su padre, Juan Servitje, establecía las bases de lo que sería una historia de éxito.
Tras el fallecimiento de su padre, Lorenzo, decidido a continuar el legado familiar, tomó las riendas de “El Molino” en 1937, lo cual marcó el inicio de su camino como empresario.
La fundación de Bimbo
En 1945, junto con Jaime Jorba, Jaime Sendra, Alfonso Velasco y José T. Mata, Lorenzo Servitje fundó Bimbo, una empresa que revolucionaría la industria panificadora en México y más allá de sus fronteras.
Con una inversión inicial de un millón de pesos y un enfoque en la modernización e industrialización del pan de caja, Servitje sentó las bases de lo que hoy es un gigante global en la producción y comercialización de alimentos.
Un crecimiento sin precedentes
Grupo Bimbo, bajo la dirección de Lorenzo Servitje, experimentó un crecimiento exponencial, destacándose por su innovación en productos y procesos.
La empresa introdujo al mercado mexicano el pan de caja en un momento en que la oferta existente no satisfacía la demanda, además la introducción del empaque de celofán, la utilización de tecnología moderna y una eficiente estrategia de distribución mediante ferrocarriles fueron claves para el rápido crecimiento de Bimbo.
A un año de su partida, recordamos al fundador de Grupo Bimbo, Don Lorenzo Servitje, con esta muestra de su legado escrita de su puño y letra: pic.twitter.com/LzvxapKUE7
— Grupo Bimbo (@Grupo_Bimbo) February 3, 2018
Más allá del pan
A lo largo de su vida, Lorenzo Servitje recibió múltiples distinciones por su impacto en la industria y la economía mexicana, como la “Medalla de Honor al Mérito Empresarial” y el Premio Nacional USEM. Estos reconocimientos resaltan la importancia de su contribución al desarrollo empresarial del país.
Lorenzo Servitje fue también un hombre comprometido con el desarrollo social. Participó en la fundación de instituciones como el Instituto Mexicano de Desarrollo Empresarial (IMDE) y la Universidad Anáhuac.
Además, Servitje no solo se dedicó al crecimiento de Bimbo, sino que también se preocupó por el bienestar de sus empleados y por la responsabilidad social de la empresa. Bajo su liderazgo, Bimbo se convirtió en un ejemplo de empresa mexicana exitosa con un fuerte compromiso social.
El paso a la siguiente generación
Tras el fallecimiento de Lorenzo Servitje en 2017, su hijo Daniel Servitje Montull tomó el mando de Grupo Bimbo, así continúo y expandió el legado de su padre. Bajo su liderazgo, la empresa ha visto cuadruplicar sus ventas netas, consolidando a Bimbo como líder en la industria alimentaria a nivel mundial.
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La influencia de Servitje en México y el mundo
La historia de Lorenzo Servitje es un testimonio del poder de la visión empresarial, la innovación y el compromiso con la calidad. Su trabajo no solo transformó una pequeña pastelería en un imperio global sino que también contribuyó significativamente al desarrollo económico de México.
Hoy, Grupo Bimbo es reconocido como uno de los productores de alimentos más importantes a nivel mundial, con presencia en numerosos países y una amplia gama de productos que forman parte de la dieta diaria de millones de personas.
La familia Servitje Montull, gracias al legado de Lorenzo, figura entre las más acaudaladas de México, con una fortuna que refleja el éxito y la trascendencia de sus empresas en la industria global. Su historia es un recordatorio de cómo la dedicación, el trabajo duro y la capacidad para adaptarse e innovar pueden llevar a lograr sueños que impactan positivamente en la sociedad y la economía.
