Porque también las princesas, duquesas y reinas se equivocan al elegir sus outfits.
Kate Middleton: Pensamos que nunca se equivocaría pero el inesperado día llegó. Desde que se casó con el príncipe William, la Duquesa de Cambridge ha destacado por su impecable estilo hasta que el pasado martes estrenó un vestido estampado con flores de la firma Erdem que ha sido fuertemente criticado.
Charlene de Mónaco: No sabemos si era un vestido o un mantel, pero en definitiva nunca debió usarlo. Este colorido atuendo lo portó en el Festival de TV de Monte Carlo y fue muy criticado.
Letizia Ortiz: La ahora Reina de España, no siempre fue muy atinada en sus looks y un ejemplo claro de esto fue este vestido rosa que utilizó en 2008 durante la cena de gala en honor al Rey de Arabia Saudita. Por este atuendo, Letizia fue muy criticada.
Infanta Elena: Evidentemente, usar una capa fluorescente en una boda, ¡no es una buena opción! Este outfit lo portó en la boda del príncipe Frederik y Mary Donaldson de Dinamarca.
Máxima de Holanda: ¡Ups! Nunca hubiéramos imaginado verla con un look así. Máxima es una de las monarcas que más se arriesga a la hora de vestir pero en esta ocasión tuvo un error. En su momento, fue muy criticada por este “little black dress” que, al parecer, no era de su talla pues se le veía muy ajustado.
Magdalena de Suecia: Nunca es bueno exceder y en 2012, la monarca fue muy criticada por este vestido negro con bordados dorados que portó en la Cumbre de Comercio en Nueva York. Además, el corte del vestido no le hacía justicia a la figura de la marquesa.
Mette Marit: La princesa de Noruega no fue muy bien recibida en el festejo número 60 del rey Carlos Gustavo de Suecia por este vestido en tonos tornasol que no le favorecía nada a su figura.