El deportista Cristiano Ronaldo y la modelo Georgina Rodríguez no han querido dejar pasar la oportunidad de presumir abiertamente, publicando para ello un sinfín de imágenes en sus redes sociales, de las lujosas y placenteras vacaciones de las que disfrutan en estos momentos en la costa azul francesa.
La pareja ya ha tenido ocasión de visitar lugares tan exclusivos como Saint-Tropez o Mónaco a bordo de un yate equipado con todas las comodidades, incluido el imprescindible jacuzzi en el que ambos han posado para una foto fundidos en un tierno beso. “Mi amor”, ha escrito el futbolista luso en la descripción de la foto que ha subido a Instagram.
Por si eso no fuera suficiente, los dos enamorados han coincidido -en los escasos momentos en que han puesto pie en tierra firme- con otras personalidades públicas igualmente mediáticas, como por ejemplo el exjugador de la NBA Michael Jordan y su esposa Yvette Prieto. “Hicimos historia”, ha publicado orgulloso el delantero de la Juventus junto a la instantánea que le retrata con el antaño líder de los Chicago Bulls.
En otra llamativa fotografía, es el diseñador Tommy Hilfiger, del que todavía no ha trascendido si se encontraba en Saint-Tropez o en Mónaco, el que ha querido tener un considerado gesto con Cristiano al definirle como “leyenda” en su propio perfil de la plataforma, al tiempo que dejaba patente su afición por el deporte rey con independencia de que el fútbol no sea tan popular en Estados Unidos como en el resto del planeta.
Por su parte, la modelo mallorquina ha inundado su cuenta de Instagram de imágenes que, además de dejar patente lo espléndido de su figura a bordo del citado yate o de la moto acuática con la que ha querido “explorar” el Mediterráneo, también le han servido para promocionar algunas de las marcas de ropa de la que es imagen.
“Y nosotros, ¿también sois de colacao calentito antes de dormir? ¡A mí me encanta! Dulces sueños”, publicaba Georgina poco antes de poner fin a una de sus intensas jornadas vacacionales y haciendo referencia a una bebida a la que, curiosamente, todavía no le une ningún tipo de contrato publicitario.