El Gran Premio de Las Vegas congregó a miles de aficionados, y a figuras del entretenimiento que se dieron cita para disfrutar del GP de la Fórmula 1. La cantante estadounidense Beyoncé llegó acompañada de su esposo, luciendo un look de carreras de Louis Vuitton.
Beyoncé también vivió de cerca la adrenalina, ya que subió al auto con el piloto Lewis Hamilton al volante de un Ferrari para vivir la experiencia al máximo, además de mostrarle unos detalles del equipo y del ambiente dentro del paddock. Antes de la carrera, la pareja vivió la experiencia, que dejó a Jay-Z un poco nervioso, como él mismo admitió en un video.
La escena de cuando la famosa se subió al auto junto al británico se volvió viral y reforzó la presencia mediática del evento, demostrando que la F1 sigue siendo un imán para las estrellas internacionales.
La aparición de Beyoncé se sumó al aire glamuroso que caracteriza al GP de Las Vegas, que combina talento musical y velocidad en la pista, creando un ambiente inolvidable. Sin duda, la visita de la estrella demuestra que la F1 es mucho más que automovilismo, es un espectáculo total donde el glamour y la emoción van de la mano.