Después de tres años viviendo en Adelaide Cottage, residencia discreta dentro de los terrenos del Windsor Home Park, los príncipes de Gales están valorando trasladarse a una propiedad mayor, acorde con su papel progresivo y el crecimiento de sus hijos.
Desde agosto de 2022, la familia real reside en el tranquilo Adelaide Cottage: una vivienda modesta de cuatro dormitorios, rodeada de jardines, sin personal permanente, cercana a la escuela de sus hijos en Lambrook y elegida por su privacidad y conexión con la naturaleza.
Sin embargo, con tres hijos en edad escolar avanzada y nuevas exigencias reales, William y Kate sienten que este hogar ya no satisface sus necesidades y se han planteado la opción de trasladarse a Fort Belvedere, una mansión gótico‑revival del siglo XVIII ubicada en el Windsor Great Park, con piscina, cancha de tenis, jardines, establos y más de 59 acres. La residencia fue históricamente hogar del rey Eduardo VIII tras abdicar en 1936.
Fort Belvedere es una impresionante propiedad con fuerte carga histórica y un diseño arquitectónico singular:
- Fue construido en 1750 como pabellón de caza para el príncipe William Augustus.
- Tiene un estilo gótico-revival, con torres, almenas y arquitectura romántica.
- Cuenta con amplios salones, biblioteca, establos, una cancha de tenis, piscina privada y jardines paisajísticos.
- La propiedad dentro del Windsor Great Park, proporciona una ubicación aislada pero cercana a la vida oficial.
- Fue hogar del rey Eduardo VIII, quien residió allí hasta su abdicación en 1936. Desde entonces, ha estado bajo la administración de la Corona y fue renovado en varias ocasiones.
Actualmente, Fort Belvedere no está habitado por ningún miembro directo de la realeza, lo que abre la posibilidad para una mudanza estratégica