A tan solo días en que el bebé de Meghan Markle y el príncipe Harry llegue a este mundo hay varias preguntas en el aire. Algunas de ellas tienen ya una respuesta: la primera es que el hijo de los duques de Sussex ocupará el séptimo puesto en la línea de sucesión al trono, por detrás del príncipe Harry y desplazando al príncipe Andrés de York, hermano del príncipe Carlos. La segunda: es que el bebé, a diferencia de los hijos de Kate Middleton y el príncipe William, no nacerá ni príncipe ni princesa. ¿La razón? Un decreto de 1917 dictado por el rey Jorge V, abuelo de la reina Isabel II, el cual dice que el título de príncipe o princesa queda limitado a los hijos del rey y al hijo mayor del primogénito del Príncipe de Gales.
¿Porque Charlotte es princesa y Louis príncipe?
De acuerdo a este estatuto únicamente el príncipe George podía tener este título, no así su hermana Charlotte ni su hermano Louis. Sin embargo en 2012, la reina Isbael II realizó una nueva patente para que todos los hijos del príncipe Guillermo y Kate Middleton llevarán el título de Su Alteza Real (SAR) y fueran llamados príncipes o princesas. “Todos los hijos del primogénito del Príncipe de Gales deberán tener y disfrutar el tratamiento y título de Alteza Real con la dignidad de Príncipe o Princesa seguido de su nombre de pila o aquellos de sus títulos de honor”, ordenó la monarca inglesa.
El príncipe Harry queda excluido
De acuerdo a este estatuto, el príncipe Harry queda excluido de esta norma así como sus hijos, ya que el hijo menor de la princesa Diana y el príncipe Carlos es el menor de la familia. Pero, ¿qué pasa con el bebé de Harry y Meghan? El bebé --quien nacerá a finales de abril o principios de mayo-- llevará el título de conde de Dumbarton, si es niño; o simplemente será llamada Lady seguido por el apellido Windsor.
Esto debido a que en Inglaterra aún se siguen heredando los títulos nobiliarios únicamente por la vía masculina. Las mujeres solo son llamadas duquesas o condesas por matrimonio. Se especula que Harry y Meghan podrían renunciar a cualquier título para sus hijos, siguiendo el ejemplo de la princesa Ana, quien optó por que sus vástagos Zara y Peter no tuvieran ningún título nobiliario.