Billy Joel estrenó su documental: “Billy Joel: And so it goes”, de Susan Lacy y Jessica Levin, en el festival de Tribeca, donde cuenta su carrera meteórica a través de entrevistas y grabaciones inéditas, además de confesiones personales.
El estreno llega en un momento delicado de salud para Joel de 76 años, quien el año pasado culminó una residencia histórica de 10 años y 104 conciertos en el Madison Square Garden, pues hace unas semanas tuvo que cancelar su gira por Estados Unidos y Reino Unido tras ser diagnosticado con hidrocefalia.
Los médicos sugirieron a Joel cancelar sus conciertos, ya que habían agravado sus problemas y reducido su audición, visión y equilibrio.
Ahora, en el documental se reveló que hace 50 años aproximadamente, el cantante intentó quitarse la vida dos veces y cayó en coma después de tener un romance con Elizabeth Weber, la esposa de su ex compañero de banda Jon Small.
El intérprete tenía veinti tantos años cuando formaba parte de la banda llamada Attila con su mejor amigo Jon Small.
Joel se mudó con Samall, quien estaba casado con Elizabeth Weber. “Bill y yo pasamos mucho tiempo juntos”, dijo Elizabeth en el estreno del documental al que no asistió su protagonista; entonces, Small se dio cuenta de que algo pasaba y Joel le contó la verdad: “Estoy enamorado de tu esposa”.
El cantante confesó que se sintió mal, por lo que terminó con la banda y se distanció de su amigo.
“Me sentí muy muy culpable. Tenían un hijo. Me sentí como un rompehogares. Estaba enamorado de una mujer y me dieron un puñetazo en la nariz, que me lo merecía. Jon estaba muy disgustado. Yo estaba muy disgustado”, recordó.
Mientras tanto, Elizabeth se fue, Joel empezó a beber y años después, Elizabeth y Joel reconectaron y estuvieron casados entre 1973 y 1982, pero antes, Billy vivió un oscuro momento.
“No tenía dónde vivir. Dormía en lavanderías y estaba deprimido, creo que hasta el punto de estar casi psicótico. Así que pensé: ‘ya está’. No quiero vivir más. Tenía mucho dolor y era como si pensará: ¿para qué seguir aquí?. Mañana será igual que hoy, y hoy es un día horrible. Así que pensé en acabar con todo”.
En el documental Judy Molinari, trabajaba como asistente médica y es hermana del cantante, habló del cómo le proporcionó pastillas para dormir, las cuales el músico usaba con otro fin.
“Billy decidió que se los iba a llevar todos... estuvo en coma durante días y días... fue a verlo al hospital y estaba allí tendido, pálido como una sábana. Pensé que lo había matado”, mencionó.
Tras dos intentos de suicidio, el cantante se internó en una sala de observación, experiencia que le cambió la vida y recibió el alta un par de semanas después.
“Salí de la sala de observación y pensé: ‘puedes utilizar todas esas emociones para canalizarlas en música”, precisó.