El príncipe Harry y su hijo Archie Harrison se vieron envueltos en una polémica a causa de una serie de programas transmitidos en la plataforma SoundCloud.
Los podcasters, Christopher Gibbons y Tyrone Patten-Walsh, considerados neonazis y supremacistas blancos, fueron condenados a prisión por realizar llamados públicos a la muerte del príncipe Harry y su hijo Archie Harrison. Este caso resalta la gravedad de los discursos de odio y la necesidad de combatir la violencia y discriminación.
El discurso de odio contra el príncipe Harry y su hijo Archie
Los podcasters, identificados como supremacistas blancos, alentaron una serie de ataques a través de sus programas.
Gibbons, de 40 años, y Patten-Walsh enfrentaron cargos graves por sus comentarios violentos y discriminatorios contra los Duques de Sussex y las relaciones interraciales.
Según Daily Mail, después de grabar varios programas, Gibbons publicó algunos de esos episodios en la web bajo los nombres primero de “Lone Wolf Radio” y después de “Black Wolf Radio”, en los cuales expresaron rechazo hacia los Duques de Sussex y promovieron ideologías racistas, antisemitas, islamófobas, homofóbicas y misóginas.
En su podcast, uno de los acusados afirmó que el príncipe Harry debería ser “asesinado judicialmente por traición” y describió a su primogénito Archie como una “abominación” que debía ser “sacrificada”. Estas declaraciones alarmaron a las autoridades y llevaron a una investigación exhaustiva.
Suspensión de la cuenta de SoundCloud
La plataforma SoundCloud suspendió la cuenta de los creadores después de que el contenido fuera calificado como neonazi.
El material de Black Wolf Radio incluía al menos 21 episodios producidos entre marzo de 2019 y febrero de 2020, atrayendo aproximadamente a nueve mil oyentes.
Sentencias y libertad condicional
Gibbons fue sentenciado a ocho años de cárcel, mientras que Patten-Walsh recibió una condena de siete años.
Posteriormente, ambos estarán bajo libertad condicional durante al menos tres años. El juez Peter Lodder subrayó que, aunque cada individuo tiene derecho a sus propias creencias, estas no deben cruzar el límite hacia el fomento del terrorismo o la incitación al odio.
Además de sus podcasts, Christopher Gibbons fue declarado culpable de difundir documentos terroristas a través de una biblioteca en línea neonazi que contaba en ese momento con más de 2000 suscriptores. Patten-Walsh también transmitió propaganda del Frente de Liberación Nacionalsocialista en la red social X (ex Twitter), promoviendo el “terror político”.
Respuesta de las autoridades y consecuencias legales
El comandante Dominic Murphy, del grupo antiterrorista de la Policía Metropolitana, destacó el peligro que representan materiales como los compartidos por los acusados para atraer a personas vulnerables, especialmente jóvenes, al terrorismo. Las autoridades dedicaron horas a revisar el material para presentar un caso convincente.
El caso de Christopher Gibbons y Tyrone Patten-Walsh resalta la gravedad de los discursos de odio y la amenaza que representan para la sociedad, además de la facilidad con que son transmitidos a través de las redes sociales. Su condena envía un mensaje claro sobre las consecuencias legales de promover el terrorismo y la discriminación, y la determinación de las autoridades para combatir estos delitos.