Sarah Ferguson no forma parte de la familia real británica desde su divorcio con el entonces príncipe Andrés en 1996, aunque siguió usando el título de duquesa de York hasta este año. Incluso sigue viviendo dentro de Windsor, en Royal Lodge, bajo el mismo techo que el padre de sus hijas desde 2008.
Sin embargo, en medio del escándalo que enfrenta Andrés por las acusaciones de abuso sexual y sus nexos con Epstein, que lo llevaron a renunciar a sus títulos, Sarah fue despojada del ducado y está a punto de abandonar la casa en la que vivía, ya que se publicó el contrato de arrendamiento de Royal Lodge que Andrés firmó, lo que descubrió que no había pagado el alquiler acordado desde 2003.
Según publicó Daily Mail, Fergie, fue despedida de la cadena británica donde colaboró en programas como “This Morning” y “Loose Women”, luego de la publicación de un email que mandó a Jeffrey Epstein en 2011, llamándolo “amigo fiel y supremo”, una vez salió de prisión donde cumplió condena por tráfico sexual de menores, ha sido la gota que colmó el vaso dentro de la cadena que no quiere involucrar su imagen pública.
“Fergie no volverá a aparecer en ITV, no hay nada previsto para ella. Trabajó mucho con la cadena durante un tiempo y siempre formó parte del grupo. De hecho, estaba muy involucrada en los planes de ITV, pero ya no. Se ha terminado su relación con el canal”, aseguró una fuente al medio.
Estos emails en varios medios británicos también le costaron a Sarah Ferguson su patronato en varias fundaciones benéficas con las que colaboraba desde hace años.