La cantante se ha enfocado en su carrera musical desde que murió su esposo René Angélil.
La cantante Céline Dion perdió a su marido, el productor René Angélil, el pasado mes de enero tras una larga batalla contra el cáncer y, desde entonces, se ha centrado exclusivamente en su carrera musical y en el cuidado de sus hijos, por lo que en estos momentos ni siquiera se le pasa por la cabeza la idea de rehacer su vida sentimental al seguir profundamente enamorada del hombre que le ha dado una familia.
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“Lo quiero, todavía estoy enamorada de él, y afortunadamente también tengo el amor de mis hijos en estos momentos, así como el de todos mis fans. También amo a toda la gente con la que trabajo, así que no necesito volver a enamorarme, ya que tengo todo el amor que me hace falta ahora mismo”, reveló en el programa de televisión ‘CBS Sunday Morning’.
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El recuerdo del padre de sus hijos René-Charles (14) y los gemelos Nelson y Eddy (5) continúa especialmente presente en la memoria de la artista cuando se va a dormir por las noches y cada vez que debe salir al escenario a actuar, por lo que no puede evitar rememorar constantemente algunas de las vivencias más especiales que le dejó su largo matrimonio.
Céline estuvo hasta el último momento con su esposo.
“Siento que me voy a dormir con él todos los días y que todavía me ofrece palabras de aliento cuando tengo que dar un concierto. Estoy casada con él, nunca he besado a otro hombre en mi vida”, aseguró antes de volver la vista atrás a sus años de juventud.
“Era un hombre muy guapo y apuesto, era encantador cuando lo conocí. Además, a su lado me sentía muy segura de mí misma porque nunca me trató como a una niña pequeña. Me respetaba mucho”, indicó.
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Otra de las razones por las que Céline afronta con optimismo su futuro en solitario reside fundamentalmente en la idea de que, tras varios meses lidiando con la enfermedad, René pudo “descansar” finalmente y librarse del dolor continuo que le asolaba en sus últimos días.
“Era el hombre de mi vida, mi esposo y mi compañero. En el momento en que dejó de sufrir, me dije a mí misma: ‘Por fin está bien y el sufrimiento se ha ido para siempre”, aseveró.
