El largometraje “F1”, protagonizado por Brad Pitt y dirigido por Joseph Kosinski, ha marcado un hito en la carrera del actor al debutar con entre 140 y 144 millones de dólares en su primer fin de semana mundial. Esta cifra lo convierte en el mayor lanzamiento de Brad Pitt como protagonista, superando los 112 millones recaudados por “World War Z” en 2013.
El estreno internacional de “F1” resultó especialmente potente: se estima que 85 millones provinieron de mercados fuera de Norteamérica, mientras que 55 a 56 millones correspondieron a los Estados Unidos. Además, esta cifra posiciona a la película como el mejor estreno de Apple Original Films en salas comerciales.
La trama se centra en Sonny Hayes, un ex piloto de Fórmula 1 que regresa a las pistas para liderar una escudería al borde de desaparecer, interpretado por Pitt, acompañado por un reparto estelar en el que destacan Javier Bardem y Kerry Condon.La producción también cuenta con la participación activa del siete veces campeón Lewis Hamilton como productor, lo que añadió realismo y credibilidad a la recreación del mundo de la F1 .
El largometraje no solo destaca por la actuación de Pitt, sino también por su potente aspecto visual: filmado mayormente en locaciones reales y con una mínima intervención de CGI, el actor llegó a rodar a velocidades cercanas a las 180 millas por hora (≈290 km/h). La crítica ha elogiado las espectaculares escenas de carrera como algunas de las más intensas vistas en el cine reciente.
Sin embargo, el camino hacia la rentabilidad no está garantizado. Con un presupuesto estimado entre 200 y 300 millones, algunos analistas señalan que necesitará recaudar entre 550 y 600 millones para alcanzar el punto de equilibrio; aunque Apple podría considerar rentable el proyecto con cifras menores, incluida la explotación en VOD y plataformas. Aún así, el arranque de “F1” posiciona a Brad Pitt y Apple Studios como contendientes fuertes en el cine de verano.
Este estreno representa una carrera récord para Brad Pitt, tanto en cifras de taquilla como en calidad cinematográfica, consolidando un regreso triunfal al cine de gran espectáculo.