Madonna y Sean Penn se conocieron en 1985 cuando él se presentó sin avisar en el set del video “Material Girl” para conocer a la cantante del momento. La misma Madonna ha aceptado en diferentes entrevistas que lo de ella y el actor de “Río místico” fue amor animal a primera vista. Seis meses después de conocerse, se casaron y tuvieron lo que puede catalogarse como uno de los matrimonios más tóxicos de Hollywood en la década de los 80.
La boda de Madonna y Sean Penn, se llevó a cabo en el cumpleaños 27 de la cantante, el 16 de agosto de 1985, y fue un evento que reunió a celebridades como Andy Warhol, Tom Cruise y Cher, entre muchos otros. La ceremonia se llevó a cabo en una mansión de Malibú y se le avisó a los invitados 24 horas antes para evitar el acoso de la prensa, pero aún así, las cámaras llegaron incluso en helicópteros para acercarse lo más posible al lugar del enlace.
El evento duró solo unos minutos, pues los helicópteros que sobrevolaban la zona no permitían que se escuchara lo que decían los novios, hasta que Sean Penn salió con una pistola a hacer tiros al aire para poder tener un poco de privacidad. Un acto impulsivo y violento que dejó ver lo que estaba por venir.
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Infidelidades, celos y violencia, así fue el amor tóxico de Madonna y Sean Penn
La felicidad no les duró mucho, pues el constante acoso de la prensa a los recién casados acabó en golpizas frecuentes que “Mr. Madonna”, como la prensa apodó a Penn, le propinaba a los fotógrafos que se les acercaban. Pero los problemas para Madonna y Sean Penn no se limitaban a la respuesta agresiva del actor ante el acoso de los paparazzi. Los celos enfermizos del esposo de la cantante, las acusaciones de infidelidad y los momentos de violencia marcaron la relación tóxica de la pareja casi desde el principio.
Varios medios llegaron a afirmar que el actor tenía un arsenal en su mansión de Malibú, donde usaba fotos de los antiguos amantes de Madonna como blancos en su polígono de tiro, obsesionado con los supuestos romances extramatrimoniales que decían que tenía la cantante.
A pesar de los intentos de salvar su matrimonio, el matrimonio tóxico de Madonna con Sean Penn estaba destinado a un escandaloso divorcio. Los tabloides publicaron acusaciones de violencia doméstica, incluyendo un incidente en el que Madonna afirmó que su esposo la había golpeado con un bate de béisbol. Hubo otro episodio en el que, ya viviendo separados, el actor entró en la casa de la cantante y al no poderla controlar la amarró a una silla por ocho horas mientras la golpeaba y la insultaba lo que derivó en el divorcio inminente.
Aún con el amor tóxico que vivieron Madonna y Sean Penn, ambos han declarado públicamente que fueron el amor de sus vidas y hoy mantienen una amistad cercana. La cantante de “Music” incluso defendió a su exesposo en una demanda por acusaciones de violencia, afirmando que nunca había sido víctima de abuso físico por parte de él.
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