En julio de 1988, la Princesa Diana conoció a Michael Jackson tras bambalinas en el estadio de Wembley, antes de uno de sus conciertos benéficos en apoyo a la Prince’s Trust.
En este icónico encuentro, el rey del pop cantaría un set list de algunos de sus grandes éxitos de la época, dejando fuera “Dirty Diana”, que aunque no se refiere a Lady Di, es una canción que sí tienen connotaciones sexuales en la letra.
Fue hasta que ella se acercó, dejando al príncipe Carlos atrás, y le preguntó a Michael si cantaría Dirty Diana.
No, saqué a Dirty Diana del show por respeto a ti. Ella me contestó, “Esa es mi canción favorita”.
Ambos rieron y él comentó que por la premura del show, no pudo añadir la canción al setlist. Él describe como entre risas con Lady Di, vislumbró al príncipe Carlos acercase a la escena.
El príncipe Carlos le preguntó a Diana, ¿de qué están hablando? — Ella respondió — Oh nada... — Hay un par de cosas más que se dijeron ese día pero no puedo contarlo, sería demasiado.
Finalmente, Michael Jackson hablaba de la princesa Diana con cariño, afirmando que eran amigos. Cuando se enteró de su muerte, él dijo haber sentido un dolor profundo en su estómago. Se sentía anonadado, no podía creer que Lady Di, siendo tan generosa, había tenido un final tan repentino.