Este fin de semana, Selena Gomez y Benny Blanco se casaron en una ceremonia íntima que puso fin a meses de especulaciones. Aunque el momento es reciente, sus palabras de 2024 ya adelantaban el camino emocional que la cantante había recorrido: de una etapa de introspección y aprendizaje tras su relación con Justin Bieber, hasta el encuentro con un amor más estable y consciente junto al productor musical.
Del pasado con Justin Bieber al presente con Benny Blanco
En una entrevista de 2024, Selena Gomez habló con total franqueza de lo que había significado su relación anterior y del proceso personal que vivió después:
Fui muy reactiva. Creo que por eso estuve sola durante cinco años, porque realmente necesitaba recomponerme. … No es que no hubiera querido estar con él, simplemente no estaba en el estado mental adecuado. … He aprendido muchas lecciones y he cometido errores, y solo quiero que esto sea lo correcto.
Estas palabras, pronunciadas un año antes de su boda, hoy cobran fuerza: muestran a una mujer que decidió detenerse, sanar y prepararse para una relación distinta, con bases más sólidas.
Benny Blanco y la importancia de la empatía
En esa misma charla, Benny Blanco también ofreció su visión sobre lo que significa entrar en la vida de alguien con historia:
Cuando empiezas a salir con alguien, no solo estás saliendo con esa persona, estás saliendo con cada relación que ha tenido en el pasado … recibes cada pieza de equipaje … y tuve que encontrar la forma de construir esa confianza con ella.
Su unión de este fin de semana no solo celebra el amor, sino la madurez emocional de ambos. Es la consecuencia de haber trabajado en su crecimiento personal y en la construcción de confianza mutua. En un entorno tan expuesto como el de las celebridades, esta historia resalta por su honestidad y por cómo transforma el pasado en aprendizaje.