El nuevo disco de Taylor Swift superó el récord de ventas de álbumes en una semana, alcanzando 3,5 millones de unidades equivalentes a álbumes en los EU, según informes iniciales de la firma de seguimiento de datos Luminate, desde su lanzamiento el 3 de octubre.
De esa cifra, las ventas tradicionales de álbumes en compras físicas y digitales, representan 3,2 millones de copias, mientras que las 300.000 unidades restantes provienen de la actividad de streaming de las canciones del álbum.
Con 3,2 millones de copias vendidas, el álbum de Taylor sigue acercándose al récord de la mayor cantidad de ventas en una sola semana para un álbum en la era moderna.
El récord moderno de ventas en una sola semana lo tiene el álbum 25 de Adele, que debutó con 3,378 millones de copias vendidas en 2015.
Taylor superó la marca establecida por Adele en la era digital, donde los récords musicales ya no se miden solo por ventas físicas, sino por la combinación de streaming, descargas y formatos tradicionales.
En este escenario, Taylor revoluciona las plataformas con su nuevo lanzamiento, dominando los rankings modernos.
Comparado con su anterior álbum “The Tortured Poets Department”, que ya había registrado récords, esta nueva cifra es un salto aún mayor.
El lanzamiento incluyó ediciones limitadas y variantes exclusivas, la cuales incentivaron a los fans a obtener varias versiones, además del marketing vinculado al álbum y su posicionamiento como figura dominante en streaming, ayudaron a empujar las cifras.