Tyler Robinson compareció por primera vez ante el juez. Las autoridades encargadas de la investigación del crimen en el que murió Charlie Kirk, calificaron el asesinat0 como “una tragedia estadounidense” y el fiscal del distrito Jeff Gray, confirmó que el sospechoso actuó por una “motivación política”.
Kirk dejó a su esposa y dos hijos. Tenía un podcast en el que compartía sus convicciones conservadoras con sus centenares de miles de seguidores. Entre sus convicciones estaba la fe en un nacionalismo cristiano, la defensa de los valores de la familia tradicional y del papel abnegado de la mujer, etc.
El hombre se presentó ante el juez de forma virtual desde la cárcel en la que está detenido sin posibilidad de fianza en la localidad de Spanish Fork.
Tyler había asesinad0 al activista y aliado de Donald Trump, de un balazo disparado por un rifle de caza a una distancia de unos 180 metros. Además del cargo que enfrenta pro asesinat0 agravado, también enfrenta delitos por sus intentos de manipular a un testigo, quien era su pareja, una persona trans a quien pidió que destruyera las pruebas de su confesión y que non hablara con las autoridades ni con la prensa.
Y por si fuera poco, también tiene cuentas pendientes con la ley por dos cargos de obstrucción de la justicia y uno por cometer un crimen en presencia de un menor.
En total, son siete delitos por los que Tyler acarrea la posibilidad de la pena de muerte legal en el Estado de Utah.