Conocida por su carácter firme, toca la batería para aliviar el estrés, es fan de Iron Maiden y amante de las motos, además de admirar a Margaret Thatcher, a quien considera su modelo político.
Sanae Takaichi de 64 años llega con el liderazgo de fortalecer la defensa del país, invertir en tecnología de punta como la IA y los semiconductores, reforzar la alianza con EU, promover una economía más autosuficiente y consolidar la posición de Japón como potencia regional frente a China y Corea del Norte.
Su visión promete decisiones basadas en la modernización en un país que por décadas ha apostado por la estabilidad sobre el cambio.
La reconocida política conservadora japonesa se convierte en la primera mujer en liderar el gobierno del país. En una votación parlamentaria histórica, la líder fue elegida como primera mujer ministra de Japón.
Antes de ingresar a la política, Takaichi trabajó brevemente como presentadora de televisión. Su incursión política llegó en la década de 1980 durante el apogeo de la fricción comercial entre EU y Japón. Trabajó en la oficina de la demócrata Patricia Schroeder, una congresista estadounidense conocida por sus críticas a Japón. Ocupó altos cargos gubernamentales, incluido el de ministra de seguridad económica, ministra de Estado de Comercio e Industria y ministra de Asuntos Internos y Comunicaciones.